viernes, 29 de julio de 2011

Final Report


Pues sí, neniña, que esto ya se acaba. Otra cosa menos que te queda por hacer. Un capítulo que se cierra y ya puedes poner tu crucecita en la "task list". Porque no querías estar en el centro de Europa donde se toman las grandes decisiones en la UE??? pues ala, ya te puedes quedar contenta porque lo has logrado.

¿ El balance? pues siempre positivo, nunca negativo.

Reconozco que he pasado momentos muy duros, he mirado a la soledad de frente y he convivido con la tristeza de tú a tú. Vaya, esta frase no pega mucho con eso del balance positivo, ¿verdad?. Pero como me dijo una amiga "qué buenos fueron esos malos momentos". 

Me he dado cuenta que por muy mala, malita, muy hundida, hundidita que esté en la miseria... mientras tenga dos piernas para correr, dos manos para escribir y dos ojos para leer, todo tiene solución ó al menos se lleva un poquito mejor.

Tal vez la experiencia era la correcta y sí, tenía y quería vivirla pero el momento no fue el adecuado. Aaaayyysss, qué difícil es a veces hacer coincidir el espacio-tiempo ó en este caso los momentos vitales con los sueños. Cuando tú vas, yo vengo de allí, cuando tú estás al 100%, yo aún estoy cogiendo carrerilla. Pero, ay, amiga, cuando por fin aúnas el quiero con el puedo, el mira lo que siento y qué casualidad que yo siento lo mismo,... pues entonces, todas las piezas del puzzle cuadran, te sientes bien contigo misma porque eres coherente y no vives la vida según la película que te has montado sino que haces realmente lo que te pide el cuerpo en este momento. No creo que sea bueno vivir pensando en que cualquier pasado fue mejor ni tampoco esperando que el futuro que has imaginado que te puede hacer feliz sea real. Lo único verdadero y objetivo es lo que sientes en este momento, lo que quieres de verdad pero ahora porque está visto que las cosas cambian, que lo que antes era tú mayor ilusión, no es lo que ahora te llena de alegría.

Conclusión (porque el párrafo anterior han sido pensamientos fugazes con sentido tan sólo para mí): pues menos creer en los pajaritos preñados y más vivir el presente.

Reconozco que sí, me da un poco de pena marcharme porque aquí tenía creado mi micromundo, me gustase más ó menos, pero ya había establecido mis rutinas y eso siempre te da seguridad, además del buen rollo que tengo con las amigas que he hecho aquí. Unas chicas que para lo poco que nos conocemos me han transmitido mucho cariño y se ha creado una gran complicidad, de ésa que te permite ser tú misma y no tener que fingir si no estás bien.

Es curioso porque hace ya unos meses conocí a una chica en el avión que me dijo que todo el mundo viene a Bruselas por algo y que sirve como punto de inflexión. Mis amigas de aquí tienen cada una su historia y todas venían huyendo de España por diferentes razones y aquí han podido ver su vida desde otra perspectiva y os aseguro que vuelven muy fortalecidas. De hecho, todas se quieren quedar. En ésto yo no estoy de acuerdo y no sólo porque yo tenga a alguien que me espera en España sino porque esta ciudad viene bien como válvula de escape pero es un "break" en tu vida, algo que no es real y que aunque pases mucho tiempo aquí, no te permite echar raíces de verdad. Sabes que es algo temporal porque ni el clima, ni la gente ni la ciudad en sí, son acogedoras y bueno, todo puede pasar pero no las veo a ninguna de las tres montando el chiringuito aquí para siempre.

Y ahora viene la segunda parte.... que es descubrir qué me deparará el futuro. Estoy expectante, ya que como he dicho no quiero montarme películas, pero tengo mucha curiosidad. Se supone que voy a vivir nuevas etapas y por una parte me hace ilusión aunque también me impone. Pero... ¡¡ qué chova!!. 

Mi futuro más inmediato es agosto. Todo un mes de vacaciones en la playita, conviviendo con mi chico, que después de tantos vayvenes no nos vamos a creer eso de vernos durante un mes seguido. El plan está establecido y como diría Hannibal Smith: "me encanta cuando los planes salen bien". Tengo mucha ilusión puesta en este mes sobre todo porque quiero dejar de estar triste. Ya he tocado fondo y no aguanto más ni física ni mentalmente. Quiero disfrutar de las cosas al 100% y creo que el escenario es el adecuado. Porque si una cosa tengo clara después de estos meses es que la soledad no me gusta pero la tristeza me da auténtico pavor. Necesito vovler a ser yo misma, recuperar mi energía positiva y esas ganas de comerme el mundo y no andar como una cosa boba. Además ya he comprobado que la soledad la sé gestionar pero lo de la tristeza son palabras mayores. 

Un amigo dice que su vida tiene tres patas: familia-amigos, trabajo y amor. Si una falla puede seguir andando, pero ya si cojean dos es cuando surgen los problemas. Yo estos meses he estado haciendo auténticos malabares. Por eso, ahora ha llegado el momento de recuperar la seguridad y así poder con lo que me echen. Es surrealista ver como la gente piensa que soy super fuerte cuando en realidad soy una moñas de órdago. El problema es que soy puro sentimiento... ¿¿la cabeza?? ...uuummm, pues sí, es eso que va encima de los hombros pero no me dice nada más. A veces es complicado vivir tan dominada por los sentimientos pero después de 30 años viviendo con una misma ya me voy acostumbrando, por eso... tú dame soledad pero no me des tristeza.

Ah, mi planta increiblemente sigue viva, a pesar de que tampoco ha visto mucho el sol!!! "Semos" unas supervivientes!!!

Y colorín colorado, este cuento se ha acabdo!!!. A cerrar las maletas y a disfrutar de mi querida España!!!

To be continued.... pero con 15ºC más y un buen Albariño entre mis manos!!!

Au revoir, Mordor!!! 

Y aquí dejo una canción que me daba un subidón de energía cuando corría por el parque y por un instante me hacía sonreir. La imagen que veían mis ojos era una esplanada de césped flanqueada por dos hileras de árboles. La sensación es más difícil de explicar....




jueves, 14 de julio de 2011

Demasiada poca gente se suicida


Alguien puede considerar normal estar el 14 de julio enfundada en un forro polar y tomando en casita un café lo máááááás calentito posible????.

De siempre me ha gustado España y he estado muy orgullosa de mi país pero desde que vivo en Mordor me reafirmo en que de los Pirineos para arriba el mundo es otra historia y no precisamente de las buenas!!.

Si es que se te quitan las ganas de todo.... Vas de compras y ves todas las tiendas con ropa de colores llamativos, shorts, vestiditos y piensas.... "¿¿ pá qué??" si traes los bajos del pantalón calados, llevas un abrigo en la mano y te mueres de frío tan sólo de pensar que tienes que quitarte el jersey para probarte esa camiseta minúscula y finííísima!!!. Entonces tu depresión va in crescendo porque encima ni puedes tirar del remedio infalible para las penas de toda mujer... el shopping!!!!.

Después te sientes cansadísima porque como hay la misma intensidad de luz desde las 5:30 de la mañana (porque amanece pronto de narices) hasta casi las 10 de la noche, pues vas a las 6 de la mañana y abres un ojo y dices "ya es hora de levantarse" y si a eso le unes que eres una empanada como yo que va autómata perdida por las mañanas pues... alaaaa, te  duchas, te haces el café y cuando te sientas y enciendes el ordenador piensas "alma de cántaro, que aún te quedan casi dos horas para entrar a trabajar!!!" pero claro tú ya estás con todo hecho.

Ah, y no debemos olvidar la bonita costumbre que tienen por estas tierras de no poner persianas en las casas.... no, si entre lo de los contenedores, la lavadora y las persianas creo que soy más caprichosa de lo que pensaba!!!.

Llegué el domingo de España y llevo cuatro días sin ver el sol. No paro de comer zanahorias para ver si entre nube y nube se consigue escapar un rayito de sol y ahí estoy canina para poder absorber un poquito de vitamina D.... sólo un poquito nada más.... por favor!!!

Si es que me siento como esas pobres gallinas ponedoras a las que tienen despiertas casi las 24 horas del día con los focos encendidos para que pongan huevos como locas. Ahora sí que entiendo lo del bienestar animal!!! viva la ganadería ecológica!!! aunque si lo de ecológico es por respetar su hábitat natural, compadezco a las pobres gallinas belgas.... 

Buuuufff, estoy desvariando, verdad??? pero es que es lo que digo, que este ambiente no puede ser sano, que se suicida muy poca gente para lo que sus pobres biorritmos tienen que aguantar!!. Y ahora entiendo ese carácter frío, distante, arisco.... pobrecillos, no es su culpa. Demasiado hacen con seguir viviendo un día más!!!. Prometo no volver a decir que los guiris son unos sosos!!! lo prometo!!!.

Es que les marca el carácter porque el caso del  "monstruo de Amstetten" no podría haber pasado en España ni de lejos. No porque no haya pirados, que los hay, pero en España nos gusta hablar con los vecinos, saludamos en la escalera y mantenemos conversaciones aunque sean tontas y además de ser más sociables, pues sí, somos cotillas y nos interesa lo que pasa en la casa del lado. En cambio los austriacos y países vecinos no. Si aquí vas por la calle, te empujan (porque esa es otra, van como elefantes) y encima te miran mal cuando te acaban de empotrar contra una farola. Sé que soy un poco exagerada pero es cierto!. 

Bueno, pero no pasa nada!!! voy a respirar, a tomarme mi café y a seguir disfrutando de esta maravillosa experiencia de vivir en el centro de Europa!!! (anda que me lo quería perder, eh!!).

Y para terminar... venga, un poquito de humor negro!!

miércoles, 13 de julio de 2011

Diógenes versión "Reciclado"



Sé que tengo un problema. Soy consciente de ello y lo primero es reconocerlo. 
Se podría decir que padezco el Síndrome de Diógenes del reciclado. Porque sí, todas esas botellas de plástico que veis en las fotos las he acumulado en mi casa yo solita!!! todas, todas, toditas son mías!!!.

Se supone que la teoría de un buen reciclado de plástico es separarlo de la basura orgánica y hasta ahí yo creo que he cumplido y con creces. Donde veo que estoy fallando es en el siguiente paso que es depositar toooodas esas botellitas de plástico en la calle para que se las lleven y el ayuntamiento haga lo propio, vamos, reciclar.

Pero en mi defensa he de decir que la culpa no es toda mía. Puedo reconocer que no soy de tirar las cosas alegremente pero en este caso, este querido país en el que me encuentro (aunque ya por poco tiempo) recolecta la basura dos días a la semana. Y lo de "recolecta" no es un verbo usado al azar porque aquí recogen de la santa calle y en concreto del árbol que tienes delante de tu casa, todas las bolsas de basura que la gente va amontonando. Un contenedor????? ..... éso qué es lo que es????. No seas caprichosa que aquí eso no se lleva porque dónde pueden estar mejor las bolsas de basura que en la acera???.

Y aún hay más... ya que después de casi 5 meses viviendo aquí, aún no tengo claro cuál es el día que tienes que sacar la basura orgánica y cuál el plástico. Yo por si acaso, los martes y los jueves saco las dos bolsas de colores, aunque después de haber visto que los muy rancios de los basureros se llevaban siempre la bolsa blanca de basura orgánica y dejaban ahí, al lado del árbol, solita y desamparada de la mano de Dios mi bolsa azul con el plástico, pues decidí dejar de sacarla...

Pero venga.... va.... admito que ésa no es la única razón!!! que en el fondo, como no huelen pues tampoco me importaba tenerlas en la cocina... pero creo que es evidente que he tocado fondo, así que mañana las pondré a todas en el árbol y.... a ver qué pasa!!!.

Eso sí, una vez que dé el paso de sacarlas de casa, lo cual no será fácil porque ya son como de la familia... pues intentaré no volverlas a meter aunque los basureros no las quieran!!!.

martes, 12 de julio de 2011

El poder de un anillo


Llevo con ganas de escribir desde el jueves pasado pero no he podido hacerlo físicamente aunque mentalmente lo he hecho y con creces. No podía escribir porque no estaba en mi casa, en el ambiente que me gusta para desahogarme con el teclado, con mi café con leche, mi vela encendida y con esa soledad  que te permite hasta echar una lágrima si te emocionas con lo que tu cabeza está traduciendo en palabras. Supongo que me gusta darle este toque bohemio al hecho de escribir y que bueno, soy muy dada a la parafernalia y a envolver todo lo que hago ó digo de tal forma que siempre tenga un valor añadido.

Y ahora me pongo delante del ordenador porque no quería esperar más y porque soy un desastre y me he despertado, duchado y vestido una hora antes de que sonase la alarma del despertador pero no me había dado cuenta y hasta pensaba que iba tarde... así que como me he encontrado con esta horita de regalo pues no he querido esperar.

Estos días han sido un auténtico kaos emocional, con una sensación de tristeza muy fuerte que me dejaba agotada y sin ganas de nada, ni para ir de compras, porque el sábado intenté ir al Corte Inglés pero como veía que no encontraba sitio para aparcar en la calle y  había una cola muy larga para entrar en el parking, pues cogí y me fui de la zona centro, aparqué el coche en doble fila delante de una terraza y me senté a tomarme un café y a regodearme en lo triste que estaba y la sensación de desidia que me invadía. Y lo peor es que cuando te encuentras en esta situación te ves impotente porque evidentemente tienes ganas de estar bien y el hecho de irte de compras es algo que suele motivar y que no es tan fácil tirar la toalla, pero estás floja y sólo te apetece tirarte en la cama, cerrar los ojos y dejar que el tiempo pase.

Evidentemente, estaba deprimidísima y mustia como una acelga pero lo más grande es que yo misma me había provocado este estado emocional porque gracias a un maravilloso invento como es el anillo anticonceptivo había conseguido que mis hormonas montasen una fiesta dentro de mí sin yo poder controlarlas. Así que, alaaaaaa, cachondeo!!! físicamente preparada para poder estar con mi chico en la cama todo el día dale que te pego pero emocionalemte con ganas de tirarme a la Ría, hacerme bicho-bola y si me tocas pues me enfado y no respiro. Vamos que evidentemente, creo que me compensa más tirar de condones... 

Pero estas alteraciones hormonales tienen sus consecuencias porque como no sabía qué leches me pasaba pues invertí el orden de los factores, y en lugar de estar mal porque tenía un problema pues cogía y me ponía a pensar en cuál podía ser mi problema. De primeras no lo encontraba pero.... dramatizas o exageras alguna cosa que te preocupe y voualá ya tienes un problemón de órdago!!!. Eso lo traduces a que cuentas cuál es tu "problema" pero a medias, porque en el fondo no tienes un discurso bien establecido, ya que en lo más profundo de tu ser, sabes que no es para tanto y que en realidad no es que te preocupase de una forma tan exagerada y obtienes como conclusión una bonita discusión con tu novio, con silencios eternos, caras largas, y un largo etcétera.... (todo llorando, claro!!!).

A tu novio le vuelves loco y encima el pobre no reacciona como tu esperarías pero claro, porque tu "problema virtual" no era un problema real y además no le das toda la información. Él se pone a la defensiva y tú piensas: "claro, es que no me entiende!!!"...

Solución: el sábado me quité el anillito de las narices y todo va mejor. Porque un invento que se supone que te lo pones para follar como una loca pero lo único que hace es que estés mustia y discutas con tu chico.... pues como que no es un buen invento!!. (no me gusta escribir de una forma tan bruta pero hay veces que hay que llamar a las cosas por su nombre, sin paños calientes).

lunes, 4 de julio de 2011

La relatividad de la amistad


Estoy agotadísima. La semana pasada tuve visita no de una amiga ni dos, sino de tres amigas!!. Mi piso es pequeño y sólo hay un baño, por no decir que sólo tengo un espejo, así que el kaos ha sido serio.

Tenía a dos durmiendo en el salón y otra conmigo en mi cuarto, y tres maletitas esparcidas por toda la casa. Todas estas cosas de logística no me importan ya que una no es que se caracterice por el orden pero cuando ayer, con una resaca tremenda, me arrastraron por la mañana a ver la Grand Place... fue cuando dije: "o se van o las hecho!!". Pero bueno, sólo tenía que esperar unas horitas y al final las metí en un bus rumbo al aeropuerto y me pude ir a desplomarme en la cama con mi señor dolor de cabeza.

La cosa es que tengo una sensación rara. Se supone que son mis amigas de toda la vida, pero si soy sincera, creo que de toda la gente que ha venido a verme, son con las que menos conexión tengo. Por no hablar de gente que no ha venido pero tengo muy dentro de la "patata". No significa que no las quiera o que no las considere buenas amigas, pero me llama la atención esta sensación de que la amistad es algo relativo.

Hace un tiempo ya saqué la conclusión que lo de ser "amigo" no era un cargo vitalíceo. Que lo importante es el día a día y no me refiero al hecho de tener contacto directo sino a lo que yo considero que debe ser la amistad. No es el hecho de pasar lista o fichar pero sí el saber que puedes contar con esa persona y que se preocupa por tí. Yo al menos intento transmitir esa sensación a las personas que considero mis amigas.

Con ésto no es que despotrique de las que han venido pero sí que veo que no hay feeling, al menos por mi parte. Supongo que en ésto yo también tendré culpa. De todos modos no hay que dramatizar y está claro que no todas las personas valen para lo mismo. Es decir, puedes tener una gran amiga para irte de fiesta pero no para contarle un problema de trabajo. Y éso no es ni bueno ni malo, simplemente hay gente para todo.

Yo a la amistad le doy bastante importancia y por eso cuando meto la pata con algún amigo pues me como mucho la cabeza. Hace poco tuve un detalle muy feo con una persona a la que sinceramente quiero un montón y aunque me haya perdonado pues una se queda con el run-run. Por eso es importante pararse de vez en cuando a pensar y ver quién de verdad merece la pena porque me joroba mucho el cuidar una amistad que no es real y en cambio hacer feos a otras personas que me importan mucho más.

En esa ocasión metí la pata y sólo me queda decir como los niños pequeños: "no lo voy a volver a hacer más". Y es que es necesario tener bien asentada la escala de valores. Mismamente, con esta chica con la que metí la pata, tengo mil veces más de conexión que con mis amigas de "siempre". Y yo que voy de abanderada de la amistad, pues allá que caí con todo el equipo!!!.

Supongo que todos evolucionamos y no siempre tenemos por qué confluir en el camino. Tal vez me he vuelto más autista por estar en este retiro espiritual "forzoso" ó más segura en el convencimiento de que al final estamos solos. La cosa es que no es algo que controle ni mucho menos, porque estoy hablando de sentimientos. Hay gente que de verdad considero mi amiga y por los que daría todo y siempre estaría "availble" pero en otros casos, la cosa es diferente y no me produce ni frío ni calor. 

No es que vaya de diva dicendo "tú sí, tú no" como si estuviese caminando a 100 metros sobre el suelo. Vamos que no me considero tan indispensable en la vida de la gente. Pero en lo que sí que puedo opinar, que son mis sentimientos hacia los demás, pues tengo las cosas bastante claras.

Mi definición de la amistad es más de "dame un silbidito y allí estoy" que de oso amoroso, todo el día llamando y dando besos y abrazos. Es transmitir la sensación de que tú no te preocupes, que aunque no hablemos en siglos, si de repente un día necesitas algo, sílbame y allá voy. Además es como si no hubiese pasado el tiempo, te reencuentras y el feeling es el mismo. Eso me pasó con un buen amigo de la facultad con el que hacía años en los que no habíamos hablado (y digo años) pero fue volver a quedar y los dos nos sorprendimos porque de verdad es como si ayer nos hubiésemos despedido en Moncloa.

De todos modos creo que a ver si pasa este mesecito rápido y me vuelvo a la madre patria porque estas filosofadas sobre la amistad y lo divino y lo humano no pueden ser muy sanas...